Ventajas (y desventajas) de liarte con tu jefe o jefa

No te asustes: lo más normal es que veas más a tu jefe o a tu jefa como un villano de cine que como un oscuro objeto de deseo. Pero, si es al revés, no tiene por qué ser perjudicial salir con él o con ella.

No te decimos, ni mucho menos, que vayas a mover ficha si no te interesa, pero si realmente quieres hacerlo, piensa que puedes salir ganando en aspectos como estos:

• Seguridad laboral. Si tienes una relación con tu jefe/a, será más difícil que pueda despedirte. Al menos, mientras estéis juntos…
• Posibilidades de promoción. Es triste, pero a veces es más fácil que le llegue la oportunidad de ascender al compañero o compañera sentimental de un superior que a otro trabajador. Eso sí, volvemos a insistir: si no te atrae, no te lances al ataque sólo para conseguirlo.
• Protección. Si tus compañeros de trabajo te hacen la vida imposible o te hacen el vacío habitualmente, se lo pensarán bastante si tu pareja es la misma persona que supervisa su trabajo.
• El jefe será menos jefe. La típica barrera que separa al jefe del empleado dejará de existir si estáis juntos y la convivencia será más llevadera.
• Tendrás menos trabajo y más reconocimiento. Si tu jefe o jefa sale contigo, entenderá mejor tus preocupaciones, podrá quitarte parte de tu carga de trabajo en lugar de darte más y estará más dispuesto/a a reconocer tu trabajo.

Claro que, antes de lanzarse a la aventura, también hay que pensar qué puede ocurrir cuando se rompa la relación personal con tu jefe/a:

• El fin de la relación puede ser el fin de tu empleo. Si la relación acaba mal puede que a tu empleo le pase exactamente lo mismo, aunque ese es el peor de los escenarios y no tiene por qué pasar.
• Olvídate del ascenso. Ya no serás su ojito derecho, así que dejará de hablar bien de ti y probablemente se fijará en otra persona para un puesto de mayor responsabilidad.
• Tus compañeros te mirarán de otra manera. Si sigues trabajando en el mismo sitio aunque ya no estés saliendo con tu superior, prepárate para aguantar los cuchicheos de tus compañeros.
• Volverán las barreras. La distancia con tu jefe o jefa no sólo volverá a aparecer, sino que probablemente será mayor.
• Te cargará con más trabajo. Si habéis cortado, no vas a tener tiempo para aburrirte porque tu superior puede que te encargue más trabajo del que ya tenías.

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