Cómo conseguir destacar en tu trabajo frente a alguien más joven

Aunque por el título parezca que este artículo sólo pueda tener interés para los trabajadores que tenéis bastante experiencia laboral, estos consejos sobre cómo destacar en el trabajo pueden ser útiles también para los que sois jóvenes. Así podréis detectar qué hacen vuestros compañeros de más edad que vosotros para intentar sobresalir en el trabajo ante los demás… incluidos vuestros jefes.

Si eres una persona con cierta experiencia laboral -no hace falta que estés cerca de la edad de jubilación, sino simplemente ser mayor que alguno de tus compañeros- que trabaja rodeado de jóvenes, lo primero que debes tener claro es que no tienes por qué intentar aparentar algo que no eres. Tú tienes unas cualidades humanas y profesionales y los demás, con independencia de la edad que tengan, tienen las suyas. De lo que se trata es de potenciar tus habilidades y tus puntos fuertes, no de querer ser igual que alguien más joven.

Por eso está muy bien que, si eres mayor que tus compañeros de trabajo, intentes aprender siempre cosas que no conoces, como quizá las relacionadas con el manejo de la tecnología, pero sin obsesionarte por competir con los jóvenes. Sobre todo, porque esa batalla seguramente la tendrás perdida de antemano.

Enseña cuál es tu valor añadido

Es preferible que, si te preocupa cómo destacar en el trabajo, demuestres cuál es tu valor añadido como profesional. Por ejemplo, la experiencia, algo que no siempre se valora como se merece por parte de los empresarios ni de la sociedad en general. Los más jóvenes están muy preparados, pero no tienen (aún) esa experiencia. Si quieres destacar frente a alguien más joven, aplica esa experiencia que has acumulado tanto en tu empresa como en anteriores empleos para detectar problemas, corregir errores y encontrar soluciones.

Otra cualidad que puedes demostrar ante los demás en el trabajo es tu capacidad de liderazgo. Eso sí, no todos los trabajadores que cuentan con una amplia experiencia tienen esa capacidad y no todos los jóvenes carecen de ella. En realidad, la capacidad de liderazgo no depende de la edad ni mucho menos del sexo. Sino que tiene que ver más con la personalidad de cada uno, con la capacidad de empatizar con los demás y con la habilidad para motivar a un equipo de trabajo para lograr los objetivos. Y eso, aunque no dependa de la edad, siempre es más fácil de conseguir para un trabajador que lleve bastante tiempo en la empresa que para alguien que acaba de llegar.

En cualquier caso, lo importante es no ver a ningún compañero de trabajo, ya sea más joven o mayor que nosotros, como una amenaza, sino como alguien de quien aprender y con el que trabajar en equipo para lograr objetivos comunes.