Cosas que debes saber cuando consigues tu primer empleo
Todos hemos pasado por lo mismo: nuestro primer día de trabajo. Una especie de nudo en el estómago que no nos deja respirar se apodera de nosotros la noche anterior y los minutos previos a entrar allí, ante un montón de desconocidos, casi todos mayores que nosotros, con los que se supone que compartiremos años y años de vivencias laborales y en algunos casos ‘extra laborales’. Por eso es fundamental entrar con buen pie y para ello te hacemos algunas recomendaciones.
1. Todo el papeleo a punto
Cuando te han dicho que estás contratado, has de asegurarte de que tienes todo ‘el papeleo’ en regla. No te asustes, es muy fácil. Solo tienes que tener asignado un número de la Seguridad Social. Te lo van a pedir para poder formalizar el contrato. Puedes obtenerlo en cualquier oficina de la Tesorería de la Seguridad Social o de manera telemática a través de la web de esta entidad.
2. No llegar tarde el primer día
Muchas veces existen factores externos (el transporte, una incidencia inesperada…) que provocan que lleguemos tarde a trabajar. No dejes que eso ocurra de ninguna manera el primer día de trabajo. Sal con tiempo de sobra para que ante cualquier incidencia puedas llegar aún a tiempo. Da muy mala impresión que el primer día llegues tarde.
3. No temas preguntar
Cuando llegues a tu nuevo trabajo no temas preguntar. Es la primera vez en tu vida que estás en esa situación, así que tus nuevos compañeros lo van a entender. Hazlo siempre con respeto y no dejes ninguna duda por resolver, ni del trabajo no de cualquier otro tema (contractual, condiciones laborales, etc.).
4. Esperando la primera nómina
No vamos ahora a engañar a nadie. Uno de los mejores momentos del mes es cuando llega la nómina. Casi todos trabajamos para sobrevivir. Cuando llegues a tu nuevo trabajo, asegúrate de que todos los datos bancarios que des son correctos, ve guardando las nóminas y consulta también qué tipo de retención de IRPF te hacen porque cuando uno entra le retienen muy poco y eso es sinónimo de que luego en junio del año siguiente habrá que pagar a Hacienda muy probablemente.
5. Modales
Eres joven y nunca has estado en un entorno laboral ‘serio’ pero seguramente sepas que hay una serie de modales que debes seguir a rajatabla. Por ejemplo, algunos detalles como los sonidos del móvil en silencio o una forma de vestir adecuada son muy apreciados. Ni que decir tiene también que la forma de hablar y la educación ante tus jefes es indispensable. Vamos a incluir aquí otro detalle: preséntate a tus compañeros cuando llegues.
6. Muestra interés
Eres joven y acabas de llegar. Eres, por tanto, el trabajador con más margen para mejorar y ascender. Pero eso no sale solo, tendrás que ir cultivándolo día a día. Por eso te recomendamos que muestres todo el interés del mundo en aprender, que te muestres también proactivo, sin miedo a equivocarte ya que tienes la ventaja de ser un recién llegado con derecho precisamente a equivocarse.
7. Habla con tus compañeros
Sabemos que para muchos es muy difícil de primeras llegar y ser extrovertido y hablar con los demás, y más si el resto del grupo ya se conoce de antes y tiene sus propias historias y bromas. Da igual, tienes que hacer un esfuerzo. Sin dejar de ser tú mismo, debes escuchar y participar con tus compañeros de los rituales de la empresa (comer juntos, un café, un cigarro si fumas, etc.).
|