Executives sitting in seminar, clapping dirigente ejecutivo negocio empresa reunion conferencia seminario mitin aplauso aplaudir negocios sociedad compaÒia dirigentes aglomeracion reuniones conferencias seminarios aplausos aplaudir auditorio grupo accionista equipo colega ejecutiva mujer hombre entre cinco y diez personas caucasico discurso entusiasmo exito logro trabajo presentacion traje oficina interior dia sala de reunion escuchar sonriente sentado trabajar entusiasta felicitar enfoque en primer plano color gestor empresario jefe financiero socio orador presidente y director general administracion de empresas formacion debate victoria multinacional lugar de trabajo satisfecho lado a lado hombre de negocios mujer de negocios colores escuchando discursos auditorios sonrientes sentados sentarse mujeres hombres trajes grupos oficinas accionistas trabajando equipos colegas ejecutivos ejecutivas entusiasticos entusiastica entusiasticas primer plano empresaria hombres de negocios empresarios mujeres de negocios empresarias gestores patronos formaciones debates satisfechos financieros juntos socios oradores conferenciante predicador egecutivos ejecutibos egecutivas ejecutibas predicadores conferenciantes
Todos conocemos al típico pelota, ese que le dice al jefe que está muy guap@ aunque tenga su peor cara, que le dice todo el tiempo que sí, o que nunca le contradice. Es un modelo que puede funcionar a corto plazo, pero que acaba quemando, y, sobre todo aísla del resto de compañeros a quien lo practica, pues nunca querremos irnos a tomar un café o a comer con el susodicho/a.
En realidad se puede estar haciendo la pelota al jefe potenciando algunas cualidades, que, en general son muy apreciadas en cualquier empresa.
Implica compromiso con la empresa
Tener una actitud positiva y favorable ante nuevas tareas o retos, aunque no los hayas realizado previamente, es la forma de progresar profesionalmente.
Conocer los objetivos de la empresa te permitirá cuantificar el esfuerzo, y en los momentos en los que es necesario y en los que no y anticiparte con una nueva idea o forma de solucionar un problema.
Esto significa aparte todo lo que puedas de la rumorología y de los chismes de pasillo, cuanto menos mejor, además de que te reportará mejores beneficios que perjuicios.
Te evitará meterte en conflictos y podrás establecer relaciones de reciprocidad si fuera necesario.
Cuando tengas que abordar alguna discrepancia, un error, o proponer una idea no te andes con rodeo, el tiempo es oro, y el de tu jefe/jefa también. Ve al grano.
Es una finísima línea que algunas personas no saben distinguir.
Si se hace todo el tiempo lo que te indican sin proponer otro punto de vista, se puede caer en el ‘pelota’ tradicional, y a la larga no será una buena estrategia.
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